intervenida

cuando estamos cerca pasa algo: un duende maligno se acerca a nosotros te mira me mira te mira y me elije a mí, entocnes comienza a trepar por mi cuerpo y con la minuciosidad de un artesano me saca el corazón. vos y yo hacemos de cuenta que no está pasando nada pero cuando el duende se va, vos aceptás lo que él te deja de souvenir. lo agarrás como si fuera plastilina lo mirás, lo olés, lo amas(ás) y cuando estás empezando a darle forma me lo devolvés, con la frialdad de un cirujano porteño que ya está acostumbrado por demás a ese tipo de operación.