8.24.2007

buendía



la sonrisa se dibuja
con el viento suave
que penetra en nosotros
y querer verte más
y sentirte todo el tiempo
así
tan
cerca
y que no te vayas más. nuncaperonuncamás.
tener un dolor lindo
llorar y encontrarte
despeinarme y soltarme
y si los zapatos aprietan
que aprieten
porque no me importa

me quedo con el viento suave
que penetra en nosotros
y con la sonrisa que se dibuja

encontrándote dones que
sensibilizan
entendiendo cada vez menos todo
pretendiendo no entender.te

y esas cosquillas, que son de
mentira
yo juego a que las creo
hoy tengo ganas de correr muy rápido
muy sola
y llegar a un campo verde con flores,
chiquitas y amarillas
pero con pocas flores y algunas montañas
llegar agitada y tan cansada
y tirarme ahí hasta aburrirme
hasta dormirme y despertarme
y ver.te (avosatodo)
sin taparnos más que con el sol
después nunca volver, acá
a lo que hoy veo lindo

hoy

con la sonrisa que se dibuja
con la sonrisa que me dibuja
con la sonrisa que te contagia.

8.15.2007

Él-Yo (ello)

Ella : -¿ A las 5 en Zabala y Luis María Campos?
Él: - A las 5 entonces
Ella: - Te veo, adiós.


Caminando rápido con un intento de disimulo y controlando que todo en mi apariencia estuviera como debía estarlo- perfecto- , llegué agitada.


Él no había llegado aún, lo cual fue una buena noticia para mis pulmones que podrían recobrar el aire, y para acomodarme el despeinado que el viento de aquel día había logrado.
Miré el reloj, volví a mirarlo. Y lo miré otra vez.
Pensé que seguramente él llegaría tarde. Pensé que probablemente no tendría motivos. Recordé cuantas veces me lo había hecho. Pensé que realmente era un tonto.
Cruzando tranquilo, lo veo llegar. Entre bronca por la lentitud de sus pasos, y la ansiedad que me generaba volver a verlo, le dí un beso tímido, de esos que se dan con la mejilla.
Primordiaban los silencios que no dejábamos entrepasar, añadiendo palabras sin sentido.
- ¿entramos?
Su voz, venia cargada de recuerdos, imágenes y olores que se activaban con solo escucharla.
El café no era de los más lindos, era antiguo y un poco frío, pero estuvo lejos de ser el protagonista de la situación.
Nos sentamos en una mesa cercana a la ventana. El parecía apurado. Yo lo estaba pero lo disimulaba bastante bien.
Sin mirarlo, pero mirándolo, descubrí que su pelo ahora se componía de rulos largos, y una aro, antes inexistente, poblaba su nariz.
Su boca y sus ojos parecían intactos. Su sonrisa que irradiaba ironía, sus ojos que gritaban ternura. Tal cual como los deje.
Sus manos también encajaban con mi recuerdo. Limpias. Dedos cortos, uñas también cortas, ayudadas por sus dientes que así las conservaban siempre.
Las primeras frases con sentido comenzaron con temas de actualización, las cuales fueron acompañadas con un espumoso cortado.
- ¿Seguís con la facultad?
El primer sorbo resulto demasiado caliente para mi paladar.
- Sí, ya terminando por suerte. Y tu corto, ¿Cómo va?
Ahora estaba más a temperatura, pero quizás un poco amargo.
- Ahí estamos. Casi terminándose también.
Tibio y bien dulce, como me gusta.

Continuamos hablando de temas profundos, esos que nos caracterizan, y otros no tanto.
Habían pasado muchos meses, en esos meses muchas cosas, y en esas cosas demasiadas cosas.
Nuestras conciencias hablaban sin parar, pero mientras tanto nuestras miradas se cruzaban. Totalmente independizadas de las palabras, se chocaban, se conectaban, se tocaban y en un mili segundo volvían a banalidad.
Lo veía tan cambiado, parecía ser otro a aquel chico de suéter fucsia con rayas de aquella vez.
- Eh…¿me traes un tostado?. No muy tostado. Blanquito, pero que este crujiente. No, no. Mejor una medialuna, pero que no esté quemada por favor.
No, definitivamente era el mismo en su esencia.
Como siempre la humildad jamás se hizo presente en su discurso.- ¿La tendría?-
Su ironía y su terquedad, que algún día me habían conquistado, por supuesto fueron protagonistas de ese extraño pero agradable café.
- Bueno, un gusto verte
- Igual para mí, nos vemos
- Dale, dale, arreglamos.

Nos despedimos simulando un próximo encuentro. Nos encantaba mentirnos.
Me aleje con pasos distraídos, pensando que esa tarde me había encontrado con él, pero también con ella, de hace unos tres años atrás.

8.09.2007

tengo

tengo todo y no lo veo
tengo un globito de nube que piensa sobre elementos difusos

veo todo y no lo tengo
veo en una ceguera de negación como flotan mis ideales
a mi
izquierda, indomables

intento todo y no lo logro
intento acomodarme, organizarme y caminar
por
donde
quiera, por donde prefiera
y no lo logro

tengo mi vida y no puedo
tengo tanto que no puedo. exijo tanto que no puedo

tengo que no quiero
y te quiero
aunque
no tengo

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Argentina
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