Este año que se va empiezo a odiar un poquito menos los balances y acepto que los bueno y lo malo no siempre tienen que alcanzar un equilibrio perfecto.
Este año cambié y crecí bastante más que el anterior, pero con cierta y especial nostalgia.
Este año mis amigas y yo morimos de amor. Algunas todos los días otras sólo un fin de semana, pero morimos de amor y todavía hay alguna resucitando. Quizás ese síntoma común que presentamos nos unió más que nunca.
Este año no pude dialogar con papá y empecé a convivir con la idea de que la familia tan linda no existe, que todo tiene sus fallas y que las fallas duelen y se ven por más que cerremos los ojos y con ellos la puerta de nuestra habitación.
También, en todo este año pensé… pensé mucho y casi de más, y de tanto pensar lloré más de lo que debía encontrando palabras que no consuelan caprichos pero conducen a dejar de pensar un poquito y buscar para también descansar, respirar y vivir dejando ser a las cosas, al tiempo, a nosotros.
Este año, una persona de ciento un años, mi bisabuela Lucía, saltó de la tierra al cielo y despedirla me dolió más en mi infancia que en el presente.
Y extrañé… extrañé mucho.
Extrañé muchas cosas este año: a mi abuela Ethel, a Ale, extrañé comer al mediodía con mamá y tomar mate un miércoles a la tarde con mi vecina de enfrente.
Este año las circunstancias me pesaron pero no me mataron y las cotidianeidades me causaron, en más de una oportunidad, tanta gracia que me divertí.
Dejé de ir a misa, y cambié el padre nuestro de cada noche por recitarle monólogos interiores desde el bondi, sin estar del todo segura que realmente existe y que está ahí escuchándome.
Conocí muchas personas, comprobando que “hay de todo en la viña del señor” y que la gente a veces puede ser tan repugnante que no se entiende qué mierda es lo que les pasa.
Aprendí dos cosas: que disfruto sacar fotos y que el tiempo es el bien escaso más preciado que tengo.
Este año estuve muy cansada por correr al pedo en más de una oportunidad. Ahora busco la forma de empezar a caminar despacito pero sin perder el ritmo, lo cual me está costando bastante y se convierte en un desafío.
Este año, entre tanto que pensé, también recordé y ahora creo que no siempre es malo perder algo o alguien, que a veces un sweater rojo puede perderse y a la vez encontrarnos mucho tiempo después.
Este año cambié y crecí bastante más que el anterior, pero con cierta y especial nostalgia.
Este año mis amigas y yo morimos de amor. Algunas todos los días otras sólo un fin de semana, pero morimos de amor y todavía hay alguna resucitando. Quizás ese síntoma común que presentamos nos unió más que nunca.
Este año no pude dialogar con papá y empecé a convivir con la idea de que la familia tan linda no existe, que todo tiene sus fallas y que las fallas duelen y se ven por más que cerremos los ojos y con ellos la puerta de nuestra habitación.
También, en todo este año pensé… pensé mucho y casi de más, y de tanto pensar lloré más de lo que debía encontrando palabras que no consuelan caprichos pero conducen a dejar de pensar un poquito y buscar para también descansar, respirar y vivir dejando ser a las cosas, al tiempo, a nosotros.
Este año, una persona de ciento un años, mi bisabuela Lucía, saltó de la tierra al cielo y despedirla me dolió más en mi infancia que en el presente.
Y extrañé… extrañé mucho.
Extrañé muchas cosas este año: a mi abuela Ethel, a Ale, extrañé comer al mediodía con mamá y tomar mate un miércoles a la tarde con mi vecina de enfrente.
Este año las circunstancias me pesaron pero no me mataron y las cotidianeidades me causaron, en más de una oportunidad, tanta gracia que me divertí.
Dejé de ir a misa, y cambié el padre nuestro de cada noche por recitarle monólogos interiores desde el bondi, sin estar del todo segura que realmente existe y que está ahí escuchándome.
Conocí muchas personas, comprobando que “hay de todo en la viña del señor” y que la gente a veces puede ser tan repugnante que no se entiende qué mierda es lo que les pasa.
Aprendí dos cosas: que disfruto sacar fotos y que el tiempo es el bien escaso más preciado que tengo.
Este año estuve muy cansada por correr al pedo en más de una oportunidad. Ahora busco la forma de empezar a caminar despacito pero sin perder el ritmo, lo cual me está costando bastante y se convierte en un desafío.
Este año, entre tanto que pensé, también recordé y ahora creo que no siempre es malo perder algo o alguien, que a veces un sweater rojo puede perderse y a la vez encontrarnos mucho tiempo después.
12 comentarios:
las ganas de contar y decir.
y contar y decir de nuevo.
eso este año creció,
tal vez tendría que haberlo agregado en el textito.
y también que este año empezó desdelapanza....
eso fue bueno.
para mí eso fue muy bueno.
Macanuda;
Este balance me pareció de una dulzura padre. Además, es aleccionador. Gracias por haberlo compartido.
Cariños
P.
Comunidad....jejejeje
jajja en este comentario me dirijo solo a ustedes dos...jaja
me suena a un escrito de Lu? ya estare empezando a hacer decantacion y viendo quien es quien? o Lu sos definitivamente evidente,diferente y especial ;o)
se los dedico..."despues de un tiempo" de william shakespeare..con todo el cariño
http://members.fortunecity.com/detalles2002/teatro/william/despues.html
se me cruzan muchas cosas x decir en cuanto a sus posteo...pero mejor me voy a dedicar a ponerme en sentimental y decirles q agradezco haberlas cruzado alguna q otra vez en el año...q son un grupo bastante particular...q no me pregunten xq pero cada una a su modo me enternesen
nada se crea, nada se destruye, todo se transforma....y eso es lo q va pasar con este año q habre nuevas puertas a los misterios las risas y el dolor....
ladys, brindo por lo tomado , x lo bebido y por lo cojido q es lo unico q uno se lleva en esta puta vida...
mas q nunca ENJOY
desdemipanza... pochy :) (y q PANZA DPS DE NAVIDAD JAJA )
:)
Qué frescura y sinceridad emana este relato. Comparto varios fragmentos, sobre todo esos monólogos. Muy lindo, me encantó.
me encantó y me dejó pensando, gracias por eso. me encontré y te imaginé a vos encontrándote, aunque suene raro.
y con "En el limbo", de La Vela, como cortina, el "textito", como le dijiste, tuvo un gustito especial.
gracias!!
de la carencia de horarios al exceso de compromisos
de la niñez a la adultez y a la niñez una y otra vez
de la plata de papucho a la plata mia
y de la plata mia a olvidarme de la plata
de estudiante a
casiporunamateria licenciada
de estar medio perdida a estar perdida del todo
del amor al sexo y del sexo al amor
y tantas otrasmuchas cosas fueron este año para mi
pero en realidad solo una
de la necesidad de expresión al placer de compartir toda esta panza mia con las suyas
gracias por tanto a todos, y sobre todo
a las gloriosas macanudas* que hunden sus dedos en el teclado sin parar
para darnos de que pensar y sentir y comentar todos estos meses.
las amomucho macanudas, les deseo lo mejor este año (quedan 3 días ja quien sabe) y el que viene, y ya que estamo' todos los siguientes también.
un abrazo
Los pelitos de mi brazo se ponen de acuerdo en levantarse al mismo tiempo y un aire frío recorre mi médula. Porque tu año es mi año, y en ese balance no solo me siento incluida sino identificada. Porque morí de amor con vos, me queje de las 24 horas que no alcanzan y juntas nos reimos de las cotidianidades.
Y te extrañe.
Extrañe a Ethel, o a esa, mi abuela, la que no fue.
Pero sin duda, al que másmás extrañé fue a Lucky
(como no lo incluiste? indignada)
te quiero mucho Lu!
Por más balances donde me incluyas,
Salud!
marialapaz
gracias suena hasta tacaño para agradecerte ese comentario !
sos muy linddddda!
felices vacaciones queridas macanudas*!
Parece un balance maduro, no de una niña apenas llegando a la mayoria de edad.
wow, si que es un balance maduro, sincero y sentido.
las cosas cotidianas a veces cambian año a año y duele, cuesta adaptarse, pero al final terminamos acostumbrandonos.
aunque siempre extrañamos ciertos detalles.
la idea de la familia linda. eso fue muy... triste y me llego mucho leerlo; ya que esa idea comenzo a resonar en mi cabeza una y otra vez desde muy chico.
yo este año mori de amor como nunca antes lo hice.
"sometimes i try
sometimes i lie, with you
sometimes i cry
sometimes i die, it's true
somewhere i find
something that's kind
and i've crossed the line again
a line I drew in sand
still you give me everything
and everything's not enough"
estoy escuchando ese tema de depeche mode y me parecio justo.
mucho tiempo sin leerte (o leerlas)
que gusto que la vuelta sea tan conmovedora.
que tengan un comienzo de año hermoso!
qué lindos comentarios!
qué nuevos tantos de todos esos comentarios.
me voy contenta.
me voy muy contenta!
nos leemos...
Lu*
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